(...)"En aquellos días no se sabía que aquel Brujo
debía esperar más tiempo para enamorarse. Y que sólo lo haría cuando una mujer
desmedida y confusa, sin nombre y sin aldea, apareciera en las noches de los
confines, desapareciera en los amaneceres.
Hoy es una noche de esas, con esa Luna niña…con esa Luna grande… con cientos de flores de jacarandaes que regaron las veredas, con jazmines que ondulan en el aire. Con esa música tenue, ese saxo, esa guitarra y la memoria que canta.
Hoy, ese Brujo lobo, ese Mago hombre…ha de venir a buscarme, porque sabe que en los confines, una mujer desmedida, en la madrugada…con la madrugada…desaparecerá hechizándolo"(...)
©® y RNPI Susana Inés Nicolini
(de: “Pócimas y otras Intensidades”)
Todos los Derechos Reservados
Hoy es una noche de esas, con esa Luna niña…con esa Luna grande… con cientos de flores de jacarandaes que regaron las veredas, con jazmines que ondulan en el aire. Con esa música tenue, ese saxo, esa guitarra y la memoria que canta.
Hoy, ese Brujo lobo, ese Mago hombre…ha de venir a buscarme, porque sabe que en los confines, una mujer desmedida, en la madrugada…con la madrugada…desaparecerá hechizándolo"(...)
©® y RNPI Susana Inés Nicolini
(de: “Pócimas y otras Intensidades”)
Todos los Derechos Reservados